Gerardo Galeas limpiando la tumba de su hermana En un “mar” de cruces blancas sobresalía la gorra azul de Gerardo Galeas aquel lunes 28 de octubre. Con un tacho amarillo, un cepillo y una tarrina llegó desde el recinto La Libertad hasta el cementerio Liberad del Toachi, en Santo Domingo de los Tsáchilas. Como todos los años, Galeas visita al camposanto, ubicado en el kilómetro 7 de la vía a Las Mercedes, para limpiar las tumbas de sus familiares que allí descansan eternamente. En el 2011, un accidente le arrebató a su mamá. Ahora se limita a sacarle brillo a la baldosa que recubre su sepultura. Antes de celebrarse el Día de los Difuntos, el hombre realiza el aseo de las tumbas, para el sábado 2 de noviembre visitarlas con toda su familia. Galeas acaba de limpiar la bóveda de su mamá y cruza el cementerio buscando la de su hermana, que falleció hace más de 11 años. Cuenta que no las pudo enterrar juntas por falta de espacio. En el campo...
sudor, lágrimas, saliva y sangre.