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Viven de la yuca


Si alguien quisiera contactar a José Vargas y Jhonny Jiménez el 24 de enero, seguramente estarán en un solo lugar: sus sembríos de yuca.
 
El motivo, la luna menguante que habrá ese día.

Según ellos, cuando la luna entra en esta fase, es el momento ideal para sembrar yuca.

¿Por qué? Como explicarían "los ancestros" este es un buen periodo para el crecimiento rápido y vigoroso de raíces, porque hay menos rayos lunares, así que las hojas crecen lento y la raíz (yuca) se hace fuerte y vigorosa.

"Después de casi nueve meses, que dura el cultivo, la yuca sale bien bonita, gorda y grande", menciona Jiménez, quien se dedica a sembrar, cosechar y vender este producto hace ocho años.

Menciona que se hizo yuquero porque este alimento se puede plantar en cualquier época del año. Él lo hace cada mes, y se guía por la luna.

De cinco a diez hectáreas cosecha en ese mismo lapso de tiempo (un mes), en su finca ubicada en la vía al Búa, en Santo Domingo de los Tsáchilas

Detalla que le toma uno o dos días plantar la yuca.

"Hay que sembrar constantemente para no desabastecerse, por cada hectárea invierto casi 600 dólares, en abonos y otros implementos", comentó el hombre de 33 años.

Y por cada hectárea le resultan 200 sacos de 150 libras de yuca pura, como él dice, gordas y lindas.
 
Luego de que tiene el producto en sus manos, o mejor dicho, en sacos, toma 20 diarios y los lleva a vender al Mercado Municipal. Por ellos pide 13 dólares, pero el precio es variable, dice.
 
"El precio mínimo del saco es de 12 dólares, pero hay momentos en que suele llegar a 40, cuando está cara", indica.

Jiménez asegura que en Navidad, Año Nuevo y Semana Santa son las épocas en las que se encarece este producto.

Los precios dependen del clima y de la competencia.

En invierno, por ejemplo, el costo sube porque los caminos se dañan, es más complicado "sacar" la yuca.

 
Y si de competencia se habla, Vargas es un experto.

Recuerda que hace 13 años, cuando inició en el mundo del comercio de yuca, en el Mercado Municipal sólo habían tres yuqueros. Ahora ya ha perdido la cuenta.

"Antes trabajar en esto dejaba mucho dinero. No había competencia, hoy en día ya muchas personas se dedican a este oficio", mencionó el hombre, oriundo de Chimborazo.

Él también "le tiene fe" a la luna menguante y mensualmente siembra dos hectáreas del producto.

Actualmente tiene tres recién sembradas y dos que están listas para ser cosechadas, en la comuna Colorados del Búa, en la misma provincia.

Por su parte, Cali Cuadros, comprador, se lleva ocho sacos de los que oferta Jiménez.

Hasta hace dos meses, él también era yuquero, pero a causa de la diabetes dejó el campo, el machete y la tierra para dedicarse a distribuir yuca en los diversos comercios de la ciudad.

Dos veces a la semana llega al mercado y adquiere los frutos de Jiménez o Vargas.

A pesar que tal vez no pueda volver a sembrar nunca más, no se desliga de la comercialización de este producto, que lleva el pan de cada día al hogar de estos yuqueros.


Datos:
La yuca ha sido cultivada en Sudamérica desde mucho antes de la Colonia. Se cree que es originaria de Brasil. En el Ecuador, se la cultiva en las llanuras tropicales.
La cosecha se realiza luego de los 8 y 24 meses después de plantada, por lo que puede quedarse en la tierra como defensa contra una escasez de alimentos.
Ecuador exporta yuca a 10 países en todo el mundo. El 43 por ciento de esas exportaciones fueron hechas a Estados Unidos entre el 2004 al 2008.
 


Gelitza

Esta crónica fue publicada en la edición impresa de Diario Centro de Santo Domingo de los Tsáchilas-Ecuador del 10 de enero del 2014 (www.diariocentro.ec)

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